Un día contratas con una compañía de teléfonos una “tarifa plana”, que resulta no serlo y decides, después de seis meses “luchando”, devolver el recibo y te llega una “agradable sorpresa”, ¡estás en ASNEF!, vas a tu banco de siempre y le dices que quieres cambiar la cocina y te dice que no por ese motivo, ¿te suena todo esto?…
ASNEF, ese “problemón”
Pues sí lo es, ya que es un listado de morosidad, en el que es fácil entrar pero muy difícil salir. Una vez dentro te las vas a ver y desear para que te borren, pero mientras estés en él, la mayoría de entidades financieras pasarán de considerarte cliente VIP a posible moroso.
Esto conlleva que no te van a dar préstamos, avales con lo que avales, el motivo es que su propia normativa y rigidez internas lo prohíben y aunque el mes anterior, te dieron 20.000 euros en 24 horas, hoy no te dan ni uno.
Entonces, ¿qué hago?
En todo caso, hay varias opciones, una no te la recomiendo, la drástica, pues es ilegal y te meterías en un lío; otra es no pedir el dinero y una, que podría ayudarte es solicitar un préstamo con ASNEF.
Este consiste en que en vez de dirigirte a una entidad financiera, quien te lo dará es una “Empresa de Capital Privado”, estas son mucho más flexibles y aunque te van a pedir avales como tu vivienda, no van a tener en cuenta que estés en esa lista.
Pero, ¿se van a fiar sin más?
Pues no: estudiarán tu caso, ya que deben salvaguardar los intereses de la otra parte, el prestamista, pero no tienen en consideración que estés en ASNEF (todo dependiendo del porqué), porque saben que muchos que hay allí lo están por el problema expuesto al principio de esta entrada.
Por otro lado, disponen de expertos en leyes y finanzas, que van a realizar un análisis de tu situación, pero con una flexibilidad (son empresarios, no banqueros), mucho mayor que la que vas a encontrar en tu “oficina de toda la vida”, ellos son profesionales en esto.
No me cuadra…
Ni a mí, (no, en serio: es sencillo), ellos buscan sobre todas las cosas la garantía hipotecaria y les va a dar igual que uses el dinero para una cosa o para otra, mientras lo devuelvas con el interés acordado.
Por otro lado, tampoco se van a parar demasiado en los análisis, ya que los préstamos que se conceden suelen ser una parte y no el todo, del valor de “tu casa”, por tanto, es más que suficiente para el que presta.
Ya pero si no devuelvo me embargan ¿no?
No, a no ser que te vayas del país, irónicamente hablando. Si no devuelves, te van a refinanciar, te van a tratar de ayudar, ampliarán plazos, todo lo necesario para no tener que ejecutar. El motivo es evidente: esto siempre conlleva costes innecesarios.
Además, su negocio se basa en que todos ganen dinero, no en expropiar a nadie, deben velar por sus inversores, pero también por los prestatarios, ya que solo ganan dinero (que es el objetivo de cualquier negocio), cuando todos lo hacen a la vez.
Parece muy bonito, pero no me convence…
De hecho, por más que yo te cuente, no te vas a convencer, ya que estamos hablando de algo paralelo a la banca tradicional y que en España es poco conocido; pero tanto si eres inversor, como prestatario, quizás sea interesante que te informes.
El primero tiene la garantía de un inmueble y no deposita dinero; el segundo, bueno, si tú necesitas financiación, quien realmente corre el riesgo es quien te la da ¿no? Ten en cuenta que si tú no pagas él no cobra.
Ya, pero ¿es legal todo esto?
Dar préstamos a personas que están en ASNEF es totalmente legal, ya que es una cuestión exclusiva del criterio del que presta; de hecho, los bancos no te lo dan por su propia normativa interna, no porque haya una ley que se lo impida.
Las empresas de este tipo, te ofrecen el dinero de forma totalmente legal, con contratos formalizados incluso ante notario y lo hacen con las cláusulas perfectamente entendibles y entendidas por el que lo recibe.
Pues parece que al final voy a resolver mi problema…
Espero que sí, porque sé lo que es estar en una lista de morosos por un servicio telefónico (muy habitual), que no me han dado y que después de meses pagando, me he negado a hacerlo más.
Ya sé que puedes borrarte, pero quien lo haya intentado, sabrá que es una opción lenta, agotadora y que a veces ni funciona. Al final, tienes que acabar pagando un servicio que no te han hecho, porque ellos tienen el abogado en nómina y tú no, al menos por ahora…